miércoles, 8 de septiembre de 2010

¡DIOS MIO!... QUE PROMISCUOS QUE SON LOS HOMOSEXUALES


Hace un buen tiempo atrás veía un programa de televisión americano donde una reconocida periodista entrevistaba al famoso artista George Cloney y le preguntó - ¿Con cuantas mujeres te has acostado? - A lo que el muy orgullosamente contesto - "Con más de novecientas". (Creo que fue modesto al no decir "mil").

La gente de la audiencia puso cara de admiración y contento. Nadie lo criticó. Incluso la entrevistadora dijo que era un hombre muy apuesto y que por eso las mujeres lo seguían y hasta el entrevistado dio el nombre de las mujeres con las cuales se había acostado. Eran de artistas, cantantes, bailarinas, mujeres de la farándula y el jet set. Ante la noticia otra vez la cara de contento de la audiencia y la periodista y sobre todo la presunción del muy macho de George Cloney.

Después de dos meses estaba viendo en el mismo programa como esta reportera entrevistaba a un artista que salía del closet y decía ser homosexual. La entrevistadora le preguntó - ¿En el transcurso de tu vida con cuantos hombres te has acostado? - A lo que él respondió - Con aproximadamente doscientos.

La cara de espanto de la entrevistadora era evidente. Los ojos de la audiencia eran críticos, reprochadores, asustados y a la vez condenadores.

- ¡Dios mío, que promiscuos que son los homosexuales! dijo ella reclamando al artista el cual jamás pudo presumir como lo hizo el machazo de Gorge Cloney.

Según el diccionario: PROMISCUO. - dícese de aquel que tiene más de tres relaciones con diferentes parejas sexuales en menos de un año.

La pregunta es - ¿Son solo los homosexuales promiscuos?

El otra vez asistía a uno de los prostíbulos más caros de Quito con amigos míos heterosexuales y casados. En un momento vi como estos señores presumían de ser machazos porque juraban que las mujeres que estaban allí los deseaban. Como eran políticos, tan solo sacaban los billetes de $20, $50 y hasta $100 y se los enseñaban a las chicas para que vengan acariciarlos y se porten muy mimosas con ellos. Este trajín ellos lo tienen cada 8 o 15 días. Y cada vez son diferentes chicas con las que se acuestan. Ellos no dicen que son promiscuos. Ellos dicen - " Nosotros somos muy machos porque nos gustan las mujeres".

Sigo con la historia. En las reuniones que tengo con mis amigos heterosexuales, cada uno presume de que se ha comido a una "buena hembrita", insisto, la mayoría de ellos son casados. Su ritmo sexual es en mi criterio muy activo, cada quincena que cobran su sueldo se van a donde "las masajistas", así se llaman ahora. Tan solo hago el cálculo. Si cada 15 días están con una mujer diferente, estamos hablando que un heterosexual promedio está teniendo relaciones sexuales con 26 diferentes mujeres al año, y eso por no poner a los que cada fin de semana frecuentan los prostíbulos, estaríamos hablando que se acuestan con 52 mujeres diferentes a parte de su esposa. ¿Acaso eso no es promiscuidad? La respuesta de ellos es "no", su respuesta es - "Esto es de machos".

Ante esa respuesta les pregunto - ¿Pagar dinero para que una mujer te abra las piernas es de machos? - Todos dudan en contestarme mientras que el negocio del sexo para heterosexuales cada vez aumenta más.

En una conversación con otro grupo de heterosexuales que frecuentan un grupo "espiritual" y se pusieron hablar de sus experiencias sexuales, uno de ellos dijo que una vez en fiestas de Quito se fue a una farra donde estuvieron las mejores modelos del país, jalaron coca y la orgía se armó, se comió más de cinco mujeres en una sola noche, el resto no se acuerda. Pero eso si presumió " eran las mejores peladas de la ciudad". A lo cual el resto le ovacionaron - ¡Hermano, tu realmente sí que has vivido!

Otro que esta de candidato a una de las dignidades de la ciudad dijo que desde que él se candidatizó, en menos de un mes se ha acostado con más de 20 mujeres, y no estaba mintiendo porque yo veía como le llamaban y conozco su ritmo de vida. El resto le dijo - Hermano, tienes que aprovechar.

Otro que es casado, al igual que el resto dijo que él no podía vivir sin sexo. Tenía su esposa, su moza (amante para los que no entiendan) y cada ocho días se conseguía una jovencita en las casas de citas. A lo que el resto respondieron - Hermano, estamos de acuerdo contigo. Nosotros hacemos lo mismo.

En esta conversación de este grupo "espiritual" , jamás les escuche a ellos decir que eran promiscuos, pero vi el otro día en el programa "30 minutos" un reportaje sobre dos gays que habían hecho la primera "unión de hecho" en Ecuador y para lo cual el entrevistado salía con su silueta en sombra ( aduciendo de esa manera como si el hecho de ser gay y su acto eran malos) y dijo - En Ecuador se debe aprobar el matrimonio entre homosexuales porque de esa manera se eliminará tanta promiscuidad que existe en el ambiente gay- Ese instante me quede estupefacto.

¿Acaso el matrimonio en los heterosexuales ha eliminado la promiscuidad sobre todo en los hombres?

Según los estudios hechos al genoma humano se llega a la conclusión que los seres humanos tanto "hombres como mujeres" no fuimos creados por la naturaleza o por el Creador para tener una sola pareja sexual, fuimos creados para experimentar diversidad sexual".

El otra vez preguntaba a uno de mis mejores amigos que ya tiene 43 años y es un hombre muy atractivo que tanto hombres y mujeres lo han seguido y le decía porque ya no lo veo tan romántico como era antes, lo veo más preocupado por mantener su juventud y por mantenerse siendo atractivo para otros. El me dijo - Comprendí que los hombres no somos para estar atados a una sola persona, buscamos experimentar diversidad.

Igualmente pregunte a otro amigo el porqué ya no lo veía ilusionado de encontrar una pareja en el ambiente gay después de estar más de 20 años en el mismo y me respondió tristemente - No existe fidelidad en este ambiente. - A lo que le pregunté - ¿y acaso en el heterosexual existe? - A lo que él me respondió que él me ponía las manos en el fuego por dos empleados del lugar donde yo trabajo, tanto el mesero que insistía que era muy fiel a su esposa, y la cocinera que según ella le era muy fiel a su marido en sus diez años de matrimonio. Mi amigo me decía - Ellos son un ejemplo de que las parejas heterosexuales son estables y más fieles - Y de mi parte, por conversaciones mantenidas con ellos, era indudable que defendían su fidelidad hasta la muerte.

Una tarde en la que me quede trabajando en la computadora en el segundo piso, sonó el teléfono, nadie contestaba. Fui a atenderlo y era la esposa del mesero que me preguntaba por él. Llame al hombre, pero no asomaba, fui a la cocina, no había nadie, hasta que fui a la bodega de atrás. La puerta estaba cerrada, la abrí y vi lo que ya se imaginan. Un buen rabo del mesero que estaba bombeándole a la cocinera. Al ver la cara de espanto de este hombre tan fiel tan solo le pude decir - Le llama al teléfono su esposa. - Mientras que el seguía ileso sobre la cocinera.

A veces mis amigos gays que tienen pareja se preocupan tanto por mí y me dicen asustados - Francisco, debes tener pareja porque si no seguirás siendo promiscuo como el resto... A lo que inmediatamente les reclamo. - Te juro que ustedes, los que tienen pareja, son más promiscuos que uno que no tiene. Los veo a ustedes y me aterrorizo como están buscando cada día hombres, los veo en los saunas desesperadas, buscando por la calle en sus carros, poniendo anuncios en internet. A veces llego a sospechar que tan solo tienen pareja por temor a la soledad y no por dejar de ser promiscuos. Si no tengo pareja, es porque simplemente no quiero seguir ese modelo.

A veces incluso pienso que el gay prefiere el sexo a tener pareja. Si se llega a enamorar, pesa más el sexo que pueda tener con otros a tener que comprometerse con uno solo. Puede que este equivocado, pero eso es lo que he visto.

En pocas palabras creo que generalmente el hombre sea cual fuere su orientación sexual es en su gran mayoría promiscuo, en eso no pongo las manos al fuego por nadie, ni siquiera por los curas, ni los falsos pastores que tanto predican la fidelidad sexual. Pero si hago una comparación entre los gays y los heterosexuales, llego a la simple conclusión de que los heterosexuales son extremadamente más promiscuos en relación a los homosexuales, pero que en su mundo eso no se llama "promiscuidad", más bien es algo que se presume, en cambio en el ambiente gay no se puede presumir, aunque el promiscuo sea criticado mojigatamente por otro que lo es más y que aparenta ser "santo".

Pero con esto no quiero defender a la "promiscuidad" , tan solo estoy tratando de poner los pies en el suelo, porque si uno llega a concebir que el ser gay tan solo significa ser "promiscuo" acabara como varios conocidos que presumen de ser "maduros" y que en una reunión cada uno presumía de ser más "puto" que el otro, haberse acostado con los mejores hombres de Quito, haberse comido los mejores culos y las mejores vergas del país y a la final les pregunté a todos ellos - ¿ Y qué han sacado de bueno para sus vidas después de todo esto?- Todos bajaron al mismo tiempo su cabeza, nadie presumió, nadie tuvo el tono altivo que tenía antes, todos se quedaron pensando hasta que uno respiró profundo y suspiró respondiendo - Nada , absolutamente nada.

Y en algunos casos, lo unico que consiguen es la muerte. Muchos tienen el VIH, y a pesar de tenerlo, no se cuidan y lo siguen trasmitiendo... esto es para reflexionar...

Francisco Guayasamin©

1 comentario:

Anónimo dijo...

Existe una moral hipócrita en la sociedad a la hora de hablar de promiscuidad: un hombre heterosexual que se acuesta con muchas mujeres es considerado un "macho" o "campeón", pero una mujer heterosexual que se acuesta con muchos hombres es enseguida vista como "puta" y los hombres homosexuales ni que se diga, enseguida se los juzga de promiscuos o hasta pedófilos. ¿hasta cuándo seguirá existiendo esa doble moral?