miércoles, 8 de septiembre de 2010

SABIAS QUE FULANITO DE TAL...TIENE SIDA


- No lo puedo creer - me decía angustiado un conocido - e insistía
- ¿A qué no te imaginas quién tiene SIDA? - me dijo asustado.
- ¿Quién?
- El Andrés... no lo puedo creer - e insistía poniéndose sus manos en la cara.
- Yo tampoco lo puedo creer. ¿ Cómo lo sabes? - Le pregunté.
- Fuentes fidedignas me lo contaron - me aseveraba.
- ¿Cuáles son esas fuentes?
- Fulanito de tal...., fulanito de tal y fulanito de tal que son sus íntimos amigos me lo dijeron.

Al escuchar aquella respuesta tan solo me reí.-

La única fuente fidedigna es que la persona que haya contraído el VIH te lo diga personalmente y que tenga un examen comprobatorio de que ha contraído el virus. Pero en el 99% de casos. La persona infectada de VIH lo que menos hace es contárselo al resto para que se propague la noticia. Tan solo lo dirá a personas de su suma confianza.

El otro día en el sauna escuchaba muy atento una conversación entre varias personas:

- ¿Han visto como ha bajado de peso el Geovanni?
- Sí - respondía uno alarmado.
- El siempre ha sido gordo . Toda la vida- aseguraba otro.
- Seguro que tiene SIDA - dijo aquel que hizo la pregunta maliciosamente e inmediatamente todos aseveraron con la cabeza. Y a pesar de que Geovanni jamás pisa un sauna y todos los implicados en esta conversación van a menudo al sauna empezaron a decir:

- Pero ese hombre es muy promiscuo- dijo el uno y por poco con cara de espanto..
- No se cuida - afirmó el otro.
- Le fascina la putería - dijo un asiduo cliente de este sauna.

Yo simplemente respiré profundo y suspiré. Lo que no sabían estos amigos del cuenteo es que Geovanni es muy amigo mío y se había sometido a una dieta porque estaba muy deseoso de bajar de peso y al lograrlo, juntos fuimos a comprar sus nuevos pantalones ya que los antiguos no le quedaban.

Luego fueron donde el dueño del sauna y le aseguraron que yo también tenía SIDA y que sería bueno que adviertan a los demás para que nadie se meta conmigo. A pesar de que lograron su propósito de expandir la falsa noticia, se morían de iras al verme en los días posteriores bien acompañado.

Lo chistoso es que justo estos tres expertos en conocer quien tiene o no SIDA en el ambiente se encontraron en la disco con Geovanni , lo saludaron muy alegres y cariñosos y la verlo conmigo , le aseveraron que sería bueno que se aleje de mí porque yo era un Sidoso. Geovanni ya no lo era. Otra vez me reí, porque de mí han dicho tantas cosas que ya todo me resbala. Pero tan solo me puse a imaginar - ¿ Y si fuera cierto?

Que doloroso sería ser estigmatizado por gente de tu misma orientación sexual que lo que menos le gusta es que los discriminen o los critiquen. Pero que tan fácil se vuelve criticar destructivamente y ni siquiera con bases sólidas, sino con el simple afán de destruir. Solo de pensar si eso fuera cierto , se me fue la risa al ver lo crueles que podemos ser entre nosotros mismos.

En los últimos años he tenido que escuchar en el ambiente gay de Quito lo siguiente:

- Charly murió con SIDA - Cuando en realidad murió de derrame cerebral.

Cuando Wilson un muy buen amigo mío de 30 años dejó su trabajo y fue a vivir a su ciudad natal. Los que lo vieron dijeron que había bajado mucho de peso y aseguraron que tenía SIDA. Al poco tiempo murió. El rumor se corrió - Murió con SIDA - aseguraban sus simulacros de "amigos". La realidad era que Wilson tuvo un cáncer al estómago. Pero nadie de sus amigos y conocidos al momento de su enfermedad o convalecencia fue a visitarlo. Tan solo se dedicaron a difundir la idea de que estaba con SIDA.

Cuando Milton murió el resultado fue que tuvo Tuberculosis, pero no faltaron las bocas que aseveraron que murió con SIDA.

Es decir ahora todos los gays que mueren, no pueden morir de causas naturales, a menos que sean accidentes. El que no murió accidentalmente, tengan la seguridad que algún fulanito de tal esparcirá la desagradable noticia de que el pobre murió con SIDA y no duden que estos supuestos ángeles comenzaran a criticar la vida tan mundana y promiscua del difunto y como ellos son tan cautos y controlan sus impulsos sexuales, están seguros que nunca les va a pasar.

Cuando estaba en un grupo que decidió apoyar a personas viviendo con VIH, enseguida corrieron los rumores que varios miembros teníamos SIDA. Es decir, ahora , incluso tener proyectos que apoyen a personas viviendo con VIH inmediatamente te hace acreedor al virus y al adjetivo despectivo de "sidoso" y que tan solo nos dedicamos a este tipo de proyectos porque nos dan plata cuando el requisito para ser miembro de este grupo en ese entonces era que cada miembro debía tener sus propios ingresos y trabajar como voluntario.

Cuando una persona nos confió a mí y a Marcela que realmente estaba con el VIH y que no se lo dijéramos a nadie. Pues, Marcela fue inmediatamente y lo contó a mi mejor amiga y a todos los miembros de su empresa. Otra vez , me toco respirar profundo y pensar hasta donde puede llegar una mujer que se declara ser "facilitadora" a la cual no hay como encomendarle un secreto.

El otra vez visitaba la sección "contactos" de una pagina gay ecuatoriana, un anuncio declaraba frontalmente que fulanito de tal... con nombres y apellidos tenia SIDA y que por favor nadie se metiera con él..

Otra vez me toco respirar profundo y suspirar. ¿ Acaso los máximos enemigos de los gays, somos nosotros mismos?

Una vez un buen amigo me dijo - Manténte dentro del ambiente gay durante tres meses y aprende todo lo que te enseñen, en ese tiempo serás un experto en crueldad. Aclarando que el ambiente gay, tan solo es el 10% de lo que realmente son los gays. Y tampoco generalizando que todo el ambiente sea así. Pero de que existe crueldad sin el uso de la violencia física , existe.

Al ver la crueldad que la misma gente gay tiene con aquellos que tienen o no SIDA, me preguntó el porqué actuamos así. Aunque no queramos admitir, tenemos traumas traídos desde la infancia que no queremos reconocerlos. Esta bien que la homosexualidad no es una enfermedad, pero sí es una enfermedad la mitomanía que existe en nuestro medio. La falta de aceptación , la misma discriminación existente entre nosotros mismos, la baja autoestima, la critica destructiva y venenosa hace que en ciertos casos exista gays que ni comen, ni dejan comer. Porque no son felices con ellos mismos, causan infelicidad en el resto. Porque a veces hasta esta misma realidad enfocada en ellos hace que la verdad les sea dura y enseguida ataquen en otros lo que no quieren ver en ellos.

¿Qué nos hace falta? - me preguntó.

Estamos contentos porque ya tenemos más bares, discotecas, saunas.

¿Pero dónde queda la parte humana?

¿ Qué pasa cuando un gay tiene realmente el VIH? ¿ Qué actitud toma?

En los casos reales que he tenido que presenciar. El gay que vive con el VIH lo que menos quiere es que se enteren sus conocidos y amigos de la misma orientación sexual. Se refunden, desaparecen o los que tienen posibilidades viajan al extranjero. Son realmente pocos los que buscan ayuda en las mismas organizaciones de ayuda manejadas por gays porque saben lo complejos y problemáticos que somos, sin generalizar.

¿Son realmente estas organizaciones creadas para ayudar a las personas viviendo con VIH o son un motivo para conseguir fondos, buenos viajes y beneficios para pocos o realmente son de ayuda?. He allí el dilema.

Tan solo antes de emitir cualquier criterio contra una persona que este o no con SIDA y tratar de destruir su imagen, en vez de ayudarle. Debemos pensar que ninguno de nosotros esta libre de adquirirlo. Y cuando escuchemos a alguien que nos asegure maliciosamente que fulanito está con SIDA , sería mejor respirar profundo, suspirar y pensar ¿qué pasaría si justo ese fulanito sería yo?.

Francisco Guayasamin©
Grupo País Canela™
f_guayasamin@hotmail.com

No hay comentarios: