martes, 9 de enero de 2018

ECUADOR, ANTES Y DESPUÉS DE LA DESPENALIZACIÓN DE LA HOMOSEXUALIDAD


Para comenzar este artículo me gustaría aclarar que aunque mi país es hermoso turísticamente hablando, es lamentable que  el índice de lectura por persona en Ecuador  es uno de los más bajos en América Latina: por lo tanto es alta la  ignorancia en cuanto a temas sobre diversidad sexual. Y eso no solo pasa en Ecuador… el promedio de lectura en el resto del mundo actualmente es el de un libro por año.  Hay que aclarar esto, porque últimamente mucha gente en países latinoamericanos incluido el nuestro se volvió sumamente   experta un tema muy confuso llamado  “ideología de género”.  Se propago una campaña realizada por grupos que dicen “defender la familia natural”  pero en el cual jamás han defendido ni han estado preocupados por  la infancia, en el cual  afirman que existe un lobby gay sumamente poderoso cuyo objetivo principal es sodomizar  al mundo. Gran parte  de la  gente  que salió a marchar en contra de la “ideología de género” al son de “Con mis hijos no te metas” ni siquiera tiene idea de lo que la palabra “género” significa inclusive  una de sus máximas promotoras “Amparo Medina” confunde género, con sexo.  Pero como la gente no investiga ni lee, le creyeron todo.

Antes de la despenalización la vida de una persona sexualmente diversa corría peligro sobre todo por creencias  religiosas. Por eso la gran mayoría de personas homosexuales vivió prácticamente una doble vida.  Los que se creen “libres de pecado” se han  dedicado prácticamente a hacer   la vida imposible a un   homosexual. Lastimosamente esta realidad  sigue presente en varias partes del Ecuador y en muchos países del mundo donde la vida de los sexualmente diversos, gracias a los creyentes en Dioses “masculinos” se ha vuelto un infierno.

La presión social ha sido tan fuerte por cumplir la formula binaria impuesta por El Vaticano, que pobre aquel que no siga esta norma. La misma sociedad aparentemente caritativa y cristiana,  genera los actos más atroces de crueldad en contra de  todo aquel que no cuadre en su “modus viviendi”.

Toda esta persecución hacia los sexualmente diversos  comenzó cuando un grupo de iletrados, en su mayoría criminales, ladrones, lujuriosos, enfermos mentales, y creyentes en un Dios que se complace con los asesinatos y en maldecir a la mujer… llegó a estas tierras con el sagrado objetivo de traer la luz de Cristo a los “indios” ( Los genocidas los denominaron “salvajes”.)

La enseñanza de que existe un Dios que es Padre (masculino) que tiene un solo hijo (hombre), que elige solamente a varones para realizar su apostolado y además maldice a la mujer al principio de su creación, rompió todo el equilibrio de la espiritualidad indígena donde lo masculino y femenino forman una armonía. Antes de que venga la religión cristiana, en nuestra espiritualidad  la diversidad es complementaria.  Lo masculino y femenino forman el principio creador del universo.  Entendiéndose por masculino lo creativo y lo femenino como  la fertilidad. Luego nos impusieron a través del miedo que la creación solo es realizada por un “Padre”.

Cuando los Españoles vieron que los hombres indígenas muchas veces se quedaban en casa realizando los telares, o haciendo sus ponchos, y la mujer salía a trabajar en labores de agricultura, no entendieron este principio de dualidad complementaria  y desde allí empezó el castigo en contra  de lo que ellos consideraban afeminado. Los hombres no podían realizar magníficos diseños en sus telares, porqué eso era “femenino”.  Los afeminados no entrarán al Reino de los Cielos, dice la Biblia.

Para la religión impuesta que tenemos ahora “lo femenino” es considerado inferior. Para estos seres pequeños de cerebro y cortos de corazón,  lo masculino tiene que ser destructivo. Para la mentalidad religiosa cristiana es malo parecerse a una mujer. Hay que recordar que gracias a ella, entró  el pecado al mundo y  la primera maldición de este dios, fue hecha en contra de ellas.  Es por eso que gran parte de hombres no critica las relaciones homosexuales entre sí, en Ecuador, muchos hombres las practican, pero todo mientras no tenga que relacionarse nada con lo femenino (Ser afeminado, ser pasivo, botar plumas, no casarse, o no tener hijos es lo que es condenable, del resto no importa “cuantos maricones se hayan comido” según sus presuntuosas palabras).

Las personas trans, en los tiempos pre coloniales,  eran sumamente respetadas. Ellas   tenían los dos principios universales dentro de sí, por eso en algunas culturas se las llamaba “dos espíritus”.  Antes  para ser un Chamán  era necesario ser bisexual. Nadie jamás se burló,  minimizó, ni lo condeno a los quintos infiernos a un hombre afeminado hasta que llegó la religión dominante. Hoy la población indígena  ecuatoriana está perdiendo toda su riqueza espiritual y   conocen lo que es la pobreza, el miedo y el castigo,  gracias a la evangelización.

Durante casi  500 años de imposición de un sistema ajeno al nuestro en el cual nos quitaron nuestra esencia espiritual,  influyéndonos con  la culpabilidad y el miedo, en vez de seres humanos  tenemos ahora robots, que ya no saben lo que es tener conciencia,   hombres tienen que seguir un  formato  estricto de lo que la sociedad considera masculino, mientras que las mujeres que son inculcadas a actuar en lo que es considerado   femenino acaban defendiendo su esclavitud.

Cuando llegaron los españoles a estas tierras, vieron que casi en toda América los actos homosexuales eran practicados en todas las culturas, incluso en la Costa Ecuatoriana existían los enchaquirados,  servidores sexuales varoniles al servicio del cacique. (Los enchaquirados. Pasado sexual de Guayaquil)

Lo que hicieron  estos evangelizadores, fue empezar la carnicería en contra de todo aquel que practicare este tipo de actos… Incluso causaban heridas graves y dolorosas  a los indígenas para que los perros salvajes vengan y los degüellen vivos. Con tantos actos de crueldad donde el agresor “cristiano” sentía tanto   placer al torturar a otro ser humano en nombre de Dios, siempre hay que preguntarse en estos casos ¿Quiénes son realmente  los depravados?

En tiempos de la Colonia ya se empezó a juzgar y condenar a los homosexuales. Al acto de encontrar placer sexual entre hombres se lo llamaba “pecado nefando”.

Jamás en  el Quito Colonial hubo un homosexual  condenado por la Santa Inquisición a causa del “pecado nefando”. Cuando el acusado era llevado a juicio tenía que declarar ante varios jueces  con quién había cometido aquel placentero pecado.  El acusado en ese momento empezaba a señalar a los mismos juzgadores….Preferiblemente era cerrar el caso y tratar de que el pecador no siga hablando porque los que se acostaron con él eran miembros del mismo  clero. (La inquisición y las prácticas sexuales de órdenes religiosas en Ecuador y Perú)

Cuando Alexader von Humboldt vino a Ecuador a finales del siglo XIX, se hospedo en el Convento de San Francisco de Quito. En su diario relata que nunca antes experimento que en un sitio en las noches  exista tanta lujuria entre hombres como la había dentro de aquel convento.

Prácticamente en nuestra sociedad católica la homosexualidad pulula a escondidas. En el siglo pasado se dio formas para  subsistir y la mejor forma de sobrevivir fue unirse al enemigo (entrando en la Iglesia)  terminado en otra forma de solaparse, la más desastrosa,  “la homofobia interiorizada”.

El Ecuador, al ser un país católico, hasta el siglo pasado los jóvenes tenían tan solo dos opciones para elegir lo que van a hacer el resto de sus vidas. Estas opciones estaban  basadas en los sacramentos: O te casas o te haces religioso. No había otra opción.   Es por eso que hay tantos curas que son homosexuales. Históricamente la Iglesia ha estado llena de ellos aunque aparentemente parezca que la gran mayoría de hombres dentro de la iglesia son heterosexuales. “Tremenda ilusión”.  Desde allí empieza el engaño.

Pretender que en los momentos actuales que todos o la mayoría de los curas son heterosexuales, es iluso. Gran parte de ellos  siguen atacando a los homosexuales  como método de sobrevivencia para seguir manteniendo sus beneficios.  Basta leer los Tweets de “Cura de todos”.

En varios casos que he visto a mujeres  atacar fervientemente a los homosexuales basadas en “La Palabra de Dios”, me he reído interiormente. – ¡No tienen idea con quién se acuestan!

Una de las grandes mentiras que se propagó para atacar a los homosexuales era la que estos no se reproducían. Gran parte de ellos y ellas están casados y tienen hijos. También se relaciona a la homosexualidad con la misoginia, que es el rechazo a la mujer. La sociedad en la cual vivimos  “machista” es una sociedad misógina.

Estas farsas se   han extendido popularmente  y con grandes campañas hechas por grupos que aman el poder religioso y que lucran con la causa en contra de los GLBTI. Esto ha creado que se extienda la violencia  por varios países  el mundo en contra de los sexualmente diversos. Basta ver lo que está pasando en Rusia y hasta los mismos Estados Unidos, y sin quedarse atrás Ecuador, donde después de la marcha “Con mis hijos no te metas” coicidencialmente  fueron asesinados brutalmente tres personas del colectivo GLBT justamente porque rompían con los cánones que la sociedad “machista” considera que son creados para cada género.

Hasta el siglo pasado,  si un joven se quedaba soltero después de los 26 años,  enseguida divulgaban a manera de chisme - “Hombre Maduro, maricón seguro”… No era de sorprenderse que el mismo hombre homosexual o bisexual (casado)  regara el chisme con tal de que las sospechas no  se vuelquen en contra él. Pero en la práctica este dicho no es real. Gran parte de hombres o mujeres que se quedaban solteros era porque fue su decisión  más no por su orientación.

- “Prefiero tener un hijo muerto a un hijo maricón”- incluso “prefiero tener un hijo borracho a que sea maricón”  también era una  frase que varios de nosotros tuvimos que  escuchar a nuestros padres y sorprendentemente muchos lo escucharon de sus madres, cuyos esposos eran alcohólicos o no las respetaban.

Muchos homosexuales  prácticamente vivían  dentro del armario  pensando que el día que su  familia se entere  se les iba  nos va a terminar el mundo.  Y para varios fue así… Algunos se quedaron sin casa, sin familia, sin trabajo, algunos tuvieron que salir del país y hasta algunos  se quitaron la vida.  Todas las peores atrocidades han sido cometidas en contra de la población GLBTI , y ahora que a través del activismo se están revelando estos casos, no falta quién del lado lucrativo religioso aduzca insensiblemente – Se están haciendo las víctimas”. Es por eso que en Ecuador existe un alto grado de abuso sexual por parte de hombres heterosexuales hacia infantes y adolescentes, porque no falta quíen en este caso, sobre todo mujeres, que cuando el afectado denuncie, le acusarán de que se está haciendo la víctima.

Toda esta cadena de desinformación  también hizo que varios sean asesinados tanto por ciudadanos  comunes que se creían con el derecho de “matar a los maricones” como por “el escuadrón de la muerte”, un grupo policial  de los años ochenta dedicado a eliminar a todo lo que no cuadre con el sistema Social Cristiano.   Los actos más crueles en contra de los homosexuales y personas transgénero  se han cometido y se siguen realizando  en nombre de dios.

Los homosexuales hemos sido siempre el chivo expiatorio para  los pecadores  que quieren justificar todas sus  porquerías viendo la paja en ojo ajeno.   

Justamente los que decían que preferían un hijo muerto a maricón,  en su gran mayoría eran infieles, irresponsables, gastaban el dinero en alcohol,  prostitutas y gran parte de ellos,  si dejaban embarazadas a una de sus aventuras sexuales, lo primero que hacían es recomendar el aborto. Ahora varios de estos cobardes son activistas en  ProVida , Restauración civil, o grupos que defienden a lo que ellos consideran  la “Familia Natural”.

Para esto también los medios de comunicación siempre han contribuido a mantener ignorante a la gente. La mayoría de ecuatorianos sigue relacionando  a los homosexuales con travestis u  hombres que quieren ser mujeres. No ha existido ningún tipo de educación al respecto. Los fondos que reciben las organizaciones GLBT, en vez de ser destinados para estos temas, son destinados para satisfacer la necesidad de personas pobres sin ambición de progresar dignamente que más bien  vieron en el activismo la gran oportunidad de ganar dinero fácil y crecer socialmente.

Si revisamos varias noticias sobre homosexuales  antes de la despenalización, los artículos sobre homosexualidad  presentaban  obligatoriamente a personas transgénero femeninas como “homosexuales”  y debían   estar relacionados siempre con todo lo negativo como peleas, asesinatos,  robos, drogas, prostitución, etc.

Siempre recordare cuando en el año 1998 un periodista me pidió que reúna a un grupo de homosexuales para entrevistarlos y así lo hice.  En aquel  grupo éramos  casi todos  profesionales y con  éxito en nuestras carreras. Cuando el periodista entró y nos quedó viendo tratando de analizarnos, lo primero que hizo fue preguntarme
- ¿Dónde están los homosexuales?

Él estaba esperando que le presente a un grupo de travestidos que trabajan en la prostitución o en el estilismo.

Luego de la entrevista en la cual  él  quedó sorprendido al ver que todas las ideas que tenía sobre homosexualidad  eran tan solo prejuicios, el periodista llevó la entrevista a su medio de comunicación. El reportaje no  fue publicado  porque el director  le dijo que toda noticia sobre homosexualidad tenía que ser escandalosa. Nosotros no encajábamos en lo que la gente quería leer sobre el tema.

En los medios de comunicación, el morbo vende, por lo cual es casi raro encontrar una noticia positiva sobre las personas GLBTI…y peor anteriormente. Lo más escandaloso es lo que más atrae al pueblo que está fascinado por la ilusión que le da el sistema.

Pareciera que al Ecuador nunca llegó la noticia que la homosexualidad dejó de ser enfermedad para la ciencia ya por los años setenta.  Por eso gran parte de ecuatorianos sigue utilizando la palabra “homosexual” como un insulto o como patología.  Eso no ha cambiado nada, lo vimos prácticamente en la política ecuatoriana, donde para desprestigiar a un presidente corrupto, se le asoció que era homosexual. Ahora que ya no es presidente, le llaman “la loca del ático”…. Esto es un desmedro para los GLBTI,  pero como existen activistas que no les importa la corrupción que ha perjudicado tanto a los ecuatorianos, sino vivir de la farándula, ahora hay activismo de izquierda y de derecha.  En pocas palabras, el activismo GLBTI ecuatoriano, después de la despenalización está completamente dividido.

Antes de los años noventa la palabra gay casi ni existía… “Homosexual” era sinónimo de todo lo peor que el ser humano pudiera imaginar. Para nada era una orientación sexual, era prácticamente ser condenado a la burla, al desprecio. Como las personas trans eran las más notorias, fueron las que  más sufrieron.

En la  mayoría de casos  de hombres y mujeres  homosexuales que no eran notorios… estaban condenados  a vivir en el anonimato y por salvar su pellejo, gran parte estaban  obligados a  vivir una doble vida. (Casados, religiosos y además varios  terminaban siendo  homofóbicos).

Algunos tuvimos que desarrollar códigos de comunicación para poder contactarnos y hasta pareciera que desarrollamos un sexto sentido. Por eso es que muchos de los que nos atacan, pueden engañar al resto, pero a nosotros, no.  (Investiguen casos sobre la vida sexual  de Mons. Arreguí, El cura de todos, Pastor Nelsón Zavala, Pastor Arturo Norero, etc.)

Como la juventud ya no se come el cuento de que hay un Dios amoroso que te manda al infierno si no crees en su único  hijo varón… ya no hay tantas vocaciones para el sacerdocio de hombres heterosexuales, pero de gays abundan. También  como hay que vivir de las apariencias, hasta ahora gran parte de jóvenes que son homosexuales, se sigue casando. “La mentalidad en ese aspecto no ha cambiado mucho sobre todo en ciudades o pueblos pequeños”.

Generalmente, el mundo de los hombres gays, ha sido muy apático al activismo o defensa de sus derechos – Tal como me dijera un cura – A mí me va bien porque no tengo que decir sobre mi sexualidad a nadie… Tú eres el único que se anda quejando.

Eso pasa hasta ahora – La apatía por el activismo de la gran mayoría de hombres gay es evidente. – El hombre busca variedad – Me dijo un turista gay….
No le importa si hay derechos o no… Lo importante en la actualidad, luego de la despenalización, es  tener sexo…La gran mayoría de gays con los que he conversado, están a favor del matrimonio igualitario, pero para nada están interesados en casarse.


Mientras que antes , tener sexo era una aventura total, ahora solo entras a tu móvil, abres Grindr… y te encontrarás con miles de miles de gays en tu zona, que al entablar una conversación , después de escribir -  Hola -  y si  les respondes , te preguntaran inmediatamente- ¿Eres activo o pasivo?  - A eso hemos quedado  reducidos los que defendíamos a capa y espada que los gays también somos seres humanos.  

Sé que algunos hombres heterosexuales se sorprenderán… ¡No se hagan los cojudos! Cuando en la mayoría de conversaciones  lo primero que se preguntan es - ¿Cuántas hembritas te has comido últimamente?... No es broma… la mujer siempre queda disminuida al papel de un animal. ¿Acaso no se dan cuenta del tema con las “conejitas de Play Boy?.

Practicamente , muy aparte de las luchas para conseguir los derechos para los GLBTI, lo que ha cambiado el mundo de las relaciones y comunicaciones entre sexualmente diversos es el internet. Antes una persona homosexual podría sentirse sola y hasta caer en depresión por no tener a nadie con quien conversar. Muchos de nosotros nos tragábamos todos nuestros problemas solos. Hoy basta con un poner la palabra Gay en un buscador y dar un “click” y se encuentra miles y miles de gays solamente en tu ciudad. Por lo tanto , a ningún momento creo que seamos una minoría.

Antes y después de la despenalización, los que decidimos dar la cara, tuvimos que armarnos de valor y salir adelante por nuestros méritos enfrentándonos prácticamente a todo el mundo incluso a los mismos sexualmente diversos. Al principio los libres de pecado también eran los gays, porque eran los que más nos lanzaban piedras.
(En ese tiempo dar la cara como homosexual, era ser  tachado de descarado y de  no tener nada que perder.)
Hoy, los activistas abundan, pululan, aparecen todos los días… - Solo gritan que quieren sus derechos… más derechos, y hasta se inventan derechos, pero nunca han sido preparados en estos temas y como señalé al principio, la gran mayoría de ellos no saben ni leer. Basta darse cuenta que  varios de ellos jamás han  reflexionado sobre los principios básicos de los derechos humanos. Ahora ser activista no es una cuestión de convicción, es un asunto de “estrellato”.

Como ahora ya no les lanzan piedras, sino más bien, ser activista brinda beneficios “sobre todo económicos”, ahora se toman fotos, selfies, están desesperados por obtener “fama” y reconocimiento.

Antes se luchaba por el respeto, por la tolerancia, por la inclusión de los sexualmente diversos. Ahora, ni entre los mismos activistas GLBTI se soportan. La lucha es por quién es el más notorio.

Antes reclamábamos por inclusión, ahora el activismo lucha por dinero. Si no hay dinero, no hay  activistas.

Para conseguir fondos, hay que proponer las cosas más absurdas, o las que se puedan conseguir auspicios del extranjero. Por eso la causa SIDA es la que prima.  Sin SIDA, no hay fondos. Si hay una cura, y esta no da dinero… hay que evitarla… Es preferible seguir produciendo enfermos.  El activismo que busca dinero se basa en la victimización de los GLBT, no en la superación. 

Aunque creíamos que habíamos avanzado en el respeto y la tolerancia hacia los sexualmente diversos, basta que venga una campaña bien organizada por el Opus Dei,  manipulando a los ProVida  y dirigida explícitamente en contra de  nosotros diciéndonos “Con mis hijos no te metas” para retroceder años en nuestras luchas.

Basto la imprudencia de tres denominados activistas para que pongan a toda la población católica en nuestra contra.  Jamás pensaron en nosotros ni  investigaron sobre lo que quería el enemigo. Alocadamente  fueron y pusieron una demanda en contra de varios representantes de la Iglesia Católica para que la marcha no se dé….

Prácticamente hicieron todo lo que los grupos PRO VIDA tenían planeado  – Esa era la prueba verás de que los GLBTI estábamos en contra de la iglesia según los organizadores de “Con Mis Hijos No Te Metas”,  y toda una sociedad explotó en nuestra contra.  En nombre de Dios y  de la virgen María, el fascismo creado por una mentira resurgió.  Años de lucha por el respeto fue borrado por el codo en segundos por la imprudencia de tres, que irresponsablemente  se adjudicaron la representación de los colectivos GLBTI.

Mientras estos grupos que aparentemente defienden a la familia se organizan y cada vez se vuelven más fuertes, el activismo GLBTI vive de protagonismos  y luchas desesperadas por lucrar.  No hace falta tener enemigos de afuera, actualmente gran parte del activismo “farandulero” GLBTI  ecuatoriano se ha vuelto el mayor enemigo de nosotros mismos.

Después de la despenalización de la homosexualidad en Ecuador lo GLBTI genera un gran negocio, tanto para los que están a favor como para los que están en  contra.  En el caso de nuestros atacantes, basta decir  públicamente que uno ha sido tocado por Dios, que ha experimentado una conversión personal y empezar la pastoral atacando a los GLBTI, es crear  la fórmula perfecta para que el dinero llueva. ( Investiguese los casos de “Amparo Medina”,  Pare de Sufrir y otra vez el del Pastor Nelsón Zabala y del Pastor Arturo Norero).

Tanto el activismo que afirma representar a los GLBTI  como los grupos que aducen defender a la familia natural y atacan a los homosexuales, son dos caras de la misma moneda. Todo atrae fondos económicos.

Es por eso que ahora gran parte de personas GLBTI no les interesa saber sobre sus derechos, son apáticos ante todas estas luchas y no creen en el activismo. Al final, sea antes o después de la despenalización, para estar fuera de líos, mucha gente decide quedarse en el closet o apartarse de estas organizaciones.  

Los cambios en cuanto a leyes han sido varios, pero debido a la influencia de grupos pro defensa de la familia heterosexual y para nada de la vida, se están perdiendo algunos derechos y no esperemos que pase lo mismo que está pasando en Estados Unidos donde justamente varios ProVida auspiciaron a Donald Trump y miren lo que está haciendo. No solo es cortar los derechos  de las personas GLBTI sino los derechos a la vida digna  de millones de seres humanos.

En casos de respeto a la vida, las cosas no han cambiado para nada. Lo peor es que cuando un gay es asesinado, son los mismos padres y familiares que piden que no se realice ningún tipo de investigación o denuncia. Incluso en casos que el asesino ha sido llevado preso, los familiares quitan los cargos para que su entorno no se entere que el asesinado era “homosexual”.

Si analizamos que últimamente casos de abuso sexual a infantes están saliendo a la luz y siendo denunciados, grandes marchas se están organizando en contra de la violencia hacia la mujer, pero en los casos de asesinatos a personas homosexuales, todo mundo calla. En el caso de injusticias  sobre todo a personas GLBTI, ni siquiera los activistas aparecen. 

En estos tiempos siguen siendo asesinados  homosexuales y nadie pide justicia ¿Cómo pretenden luchar por el matrimonio igualitario o la adopción homoparental?

Es por eso que antes o después de la despenalización la discriminación entre los propios GLBT sigue igual, pero como dije al principio, si la gente no lee ni investiga, los niveles de discriminación seguirán aumentando. En una última investigación de Informe Confidencial  el 84,9%  de personas viviendo en Quito  seguía rechazando a los sexualmente diversos, (Justamente después de la demanda que hicieran tres activistas en contra de miembros de la Iglesia Católica) todo por la  desinformación que existe sobre el tema y por qué la mayoría de ellos no lee. Es más fácil creer lo que les conviene creer”,  que auto educarse e investigar.

FRANCISCO GUAYASAMIN


No hay comentarios: